Convertirse en papas es una gran aventura, y como toda aventura lleva sus desafíos, sus puntos de disfrute y una cierta sensación de desconcierto y perdida en algunos momentos.
Acompañar a nuestros hijos es un proceso intenso, cada étapa evolutiva conllevara diferentes dificultades a gestionar y diferentes maravillas a apreciar, porque no solo de dificultades esta compuesta esta aventura.
Cuando hablo con papas que vienen a consultar acerca de cómo mejorar su relación con los hijos puedo observar desconcierto, sensación de impotencia, desesperación, creer que «no tiene arreglo» lo que viven o «su hijo», que no son capaces,al fin y al cabo una gran cantidad de emociones que les cuesta manejar y que les debilitan en su papel como padres.
Me gustaría transmitir que siempre hay algo que uno puede hacer, y como padres, siempre hay muchas cosas que podemos hacer para que la situación familiar cambie y nuestro hijo mejore. Lo primero es entender que nuestro hijo o hijos no son el problema, sino que el problema radica en la manera en que hemos establecido relacionarnos, ya que la familia es un sistema que solo puede entenderse en su conjunto.
Es común creer que el que tiene que acudir a terapia es nuestro hijo pero es importante saber que una gran parte del trabajo con nuestro hijo esta hecho si nosotros como padres trabajamos activamente en terapia.Es decir, que muchas de las sesiones son con los padres porque ellos serán los que comiencen a marcar nuevas formas de relacionarse con los hijos y también entre ellos como pareja y de ahí surgirán los cambios.
Acompañar a nuestros hijos es un proceso, un proceso largo y con subidas y bajadas, un proceso emocionante y de aprendizaje para todos, si con esas gafas nos lo permitimos ver,y como la propia palabra lleva implícita acompañar no es hacer por ti, no es decidir por ti, es estar a tú lado, para que sepas que puedes contar conmigo, estar cerca para mostrarte lo que tienes capacidad de hacer y en lo que te puedes superar como niño, como adolescente, como adulto.Pero para poder acompañar , para poder estar solo al lado y no encima, ni pegado, ni tapándote, tengo como padre, como persona, que estar bien y creer en mi, y sentirme capaz de.., porque solo desde ahí podremos acompañar sino siempre habrá algo que este contaminando. Y si no me siento con fuerza en las decisiones que tomo o en mi capacidad como mama o papa, pido ayuda…todos hemos necesitado ayuda alguna vez, todos nos hemos sentido perdidos alguna vez y siempre hay alguien que puede arrojar algo de luz dónde creemos que ya no la hay.
Ayuda a la familia, a la maternidad y la crianza.
Verónica Merino Rodriguez.
Psicólogo Mirasierra, Montecarmelo, Las Tablas y Sanchinarro.
tfn.647612556
namastepsicolog@gmail.com
http://www.tulugarparacrecer.com