«No hay niño que requiera más atención que aquel que un día fuiste”
Rafael Vidac.
Te propongo un ejercicio para conectar con tu niño interior:
- Te invito a que cierres los ojos y pienses en ti cuando eras pequeño, vendrán muchas imágenes, quédate con una, escoge esa imagen de ti y mira cuantos años tienes, cómo vas vestido, peinado, cómo esta tu rostro, tus gestos, si estas en movimiento o parado, si juega o se aburre y si esta solo o acompañado.
- Una vez tengas una perfecta imagen de ese niño imaginate que te introduces en la escena y de repente estas allí con él, a su lado.
- Puedes preguntarle lo que te apetezca, pero te invito a que le puedas preguntar si necesita algo de ti.
- Ahora prueba a escuchar, no siempre las respuestas llegan en el momento, da tiempo y hazle la pregunta todos los días.Quizás no esta acostumbrado a que le prestes atención y no responderá de inmediato.
- Observa si te apetece darle un abrazo , la mano o tocarle, es tú mente, puedes hacerlo.Observa si a él le apetece, si te lo permite.El contacto es muy importante.
- Tenle siempre presente, porque esa parte de ti, tú parte de niño o niña es lo más auténtico que tienes.